Buenos días a todos y todas, hoy es mi cumple y no tengo tarta... o sí, depende de cómo quiera mirarlo.
Os voy a contar lo que me ha pasado y el por qué me he quedado sin ella (o sin la que supuestamente tenía que ser).
Mi tarta favorita es la Tarta de moka y por supuesto quería hacerla bien hermosa para este fin de semana pasado, que es cuando celebraba el cumpleaños.
El viernes empezaba la maratón de celebraciones, y claro, para que la tarta quede rica... hay que hacerla con un día de antelación. Dicho y hecho. El jueves, llegué a las mil, entre unas cosas y otras... y me puse manos a la obra cerca ya de las 21.00h. Ahora, cuando estoy con las manos en la masa (literalmente)... le dió a todo el mundo por llamar al teléfono, ¿cuál fue el resultado? pues el resultado fue, que el Bizcocho genovés que estaba haciendo con tanto mimo (inicialmente) para que quedase bien esponjosito ... quedo más duro que una piedra, al no seguir ni uno de los pasos que hay que seguir... es decir, en vez de batir primero los huevos, y luego añadir la harina, etc... ¿qué hice? echar todo de golpe... El bizcocho (si puede llamarse así) no pudo quedar más duro.
A continuación tenía que hacer la Crema de moka para cubrir la tarta (que quedó buenísima) pero la dejé a medias, ya que en ese momento, me llamó mi marido para ir a tomar algo con unos amigos, así es que, la crema pastelera de café que estaba haciendo para el relleno, también se quedó a medio hacer (literalmente).
Resultado final de la noche: un bizcocho como un ladrillo de duro, la crema de moka a medias, al igual que la crema pastelera. A todo esto, el cumple era al día siguiente, la mañana trabajando y llegaría (como llegué realmente) casi a las 5 a casa.
Volví a hacer el bizcocho, pero con los nervios de que ya no me daba tiempo a preparar todos los aperitivos que quería hacer... pues no sé la que lié, que se asustó el bizcocho y no subió... Terminé de hacer las cremas para el relleno y la cobertura, e intenté salvar como pude los bizcochos (sin mucho éxito), los metí en un molde con leche caliente y brandy para emborracharlos... pero imaginaros cómo estaría el primer bizcocho del día anterior que no chupó ni una gota... (yo me reía por no llorar).
Vamos, que con lo que tenía, hice birguerías, pero si he de ser sincera... esta tarta siempre la recordaré como un intento fallido.
El año pasado la anécdota fue que tenía mal el termostato del horno y se me carbonizaron (literalmente) dos bizcochos, y este año, que supuestamente estaba bien... han quedado como una piedra (al menos uno de ellos, el otro era comestible, pero demasiado fino).
Todo el mundo dijo que estaba muy rico (y realmente estaba rico, pero a mí no me engañan... estaba de pena !!! aunque la moka lo salvaba jejeje). Menos mal que contaba con un plan B que me salvó. Gracias Rosa por tu tarta ;)
Consejo final: No hagáis las tartas con prisas y con la oreja pegada al teléfono, porque el resultado puede ser una tarta fallida...
Cuando se tiene la idea de hacer una cosa y no sale como queríamos nos quedamos un poco plof, pero no te preocupes, hoy es tu cumpleeee!!!! Así que disfrútalo, y MUCHAS FELICIDADES!!!!
ResponderEliminarBesos ;)
Muchas gracias !!! :)
EliminarLa verdad es que sí que lo he disfrutado... jeje
Besitooos
En primer lugar, muchas felicidades, espero que hayas pasado un día estupendo (salvando los pequeños percances culinarios). Y en segundo lugar, un dicho de mi abuela "el mejor escribano, echa un borrón..." y no pasa nada. Así que ánimo y otro día lo vuelves a intentar.
ResponderEliminarUn beso
Muchas gracias Mer !!!
Eliminarla verdad es que el día ha sido, cuanto menos, peculiar jajaja, pero ha sido bueno :p
En cuanto a lo de la tarta... no ha sido un borrón sino una chapucilla jajjaja, pero así queda como anécdota con la que reirse... una más de las sesiones de risoterapia que tengo últimamente con los amigos :)
Seguro que la próxima vez sale bien... eso sí, al año que viene... algo sucederá para no volver a tener tarta :(
Besitoooos ;)