Es muy sencillo, aunque veáis mucha letra. Lo más engorroso quizá sea rellenar los canelones, pero tampoco es para tanto...
Espero que os guste, y que la hagáis en casa porque merece la pena, y así coméis verdurita.
Ingredientes
Foto y receta por La Flor del Azafran |
- Pasta para hacer canelones (los míos son cilíndricos pero los hay de láminas)
- Espinacas
- 1/2 tarrina de queso de untar
- Uvas pasas
- Pimienta negra molida
- Ajo en polvo
- Perejil picado
- Tomate frito casero
- Queso parmesano rallado
- Aceite (3 o 4 cucharadas, puedes utilizar también mantequilla)
- 2 cucharadas (colmadas) de harina
- 2 vasos de leche
- Nuez moscada
- Sal
Precalentamos el horno a 180ºC.
En primer lugar, coceremos la pasta en agua hirviendo con un chorrito de aceite y un puñadito de sal.
Una vez esté cocida la pasta, la sacamos con cuidado de no romperla a un paño.
Mientras, vamos haciendo el relleno, para ello ponemos las espinacas en una sartén (si son frescas, las cocemos previamente) y las salteamos un par de minutos salpimentándola y añadiéndole el perejil y el ajo a nuestro gusto.
Una vez esté, la incorporamos al vaso batidor (yo en este caso utilizo la thermomix que lo hace rápido) junto con el queso de untar y trituramos sin llegar a quedarlo hecho una crema (debe tener una textura más sólida).
Incorporamos esta mezcla nuevamente a la sartén y le añadimos las uvas pasas (la cantidad que deseemos pues es nuestra propia receta), mezclamos y dejamos que se sofría durante un par de minutos.
Terminado el proceso, pasaremos a hacer la bechamel. Para ello pondremos el aceite en una sartén, una vez esté caliente, añadimos el harina moviéndola para evitar que se queme, a continuación, incorporamos poco a poco la leche, la nuez moscada y al final la sal, sin dejar de remover con una varilla o cuchara de palo para que no se formen grumos y quede una bechamel suave.
Una vez tengamos todo listo, vamos a rellenar los canelones con la mezcla de espinacas, queso y uvas con la ayuda de una cuchara y los iremos poniendo en paralelo (uno odetrás de otro) en una bandeja de horno.
Cuando estén todos listos, vertemos una capa de tomate frito (casero es muchísimo mejor) sobre ellos, y a continuación la bechamel y el queso parmesano.
Metemos en el horno unos 5 minutos (tened en cuenta que todos los ingredientes ya están cocinados y sólo queremos gratinar).
Y listo para comer.
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