Berenjenas con miel

Temporada de berenjenas y no podía faltar esta receta en el blog que descubrí hace cosa de un año. Está... buenísima !!! Antes hacía otro rebozado, pero con éste, quedan mucho más crujientes.
Esta receta, va especialmente dedicada a Samuel, que hace un tiempo me pidió una que fuera sencilla y no muy laboriosa, para hacersela a su madre... pues aquí la tienes, espero que os guste.
Ya sí que no tienes excusa para no cocinar... no puedes decirme que es complicada o que los ingredientes son difíciles de conseguir. Ya sabes, ¡ manos a la obra !

 Ingredientes

Foto y receta por La Flor del Azafran

• Berenjenas
• Miel
• 1 vaso de harina
• Cerveza
• Agua
• Sal

Preparación
Lavamos bien las berenjenas y las troceamos como si de patatas se tratase, dándole la forma que más te guste. No hace falta que las peles, la piel, en contra de lo que creen muchos, está muy rica y crujiente.
En un bol grande, ponemos las berenjenas troceadas, un puñado de sal y agua hasta cubrirlas y las reservaremos hasta que las vayamos a hacer (mínimo 1 hora).
En un bol pequeño, ponemos la harina y vamos añadiendo cerveza hasta que nos quede una mezcla más o menos consistente, es decir, que no esté ni muy líquida, ni muy espesa (a gusto del consumidor) eso sí, que no queden grumos.
Esta mezcla, la meteremos en el frigorífico durante al menos 1/2 hora.
Pasamos a rebozar y freír las berenjenas, para ello, las escurrimos y las secamos bien con un papel absorbente.
Las vamos incorporando al bol donde tenemos nuestro rebozado, escurrimos la masa sobrante y vamos incorporando poco a poco los bastoncitos a la sartén, con el aceite (abundante) que esté bien caliente, pues si no, se cocerán.
Una vez estén doraditas, las sacamos, escurrimos y ponemos sobre papel de cocina para retirar el exceso de aceite.
Justo antes de que vayamos a comerlas, ponemos un chorrito de miel sobre los bastoncitos de berenjena.
Es una receta que preferiblemente hay que comer en caliente, son un vicio.