Hablando con los vecinos en la piscina, coincidió que a uno de ellos, a Juan, le encanta esta sopa, también precisamente, con higos, como a mí, por lo que se la dedico con todo el cariño.
Como yo toda la vida la he tomado con esta fruta, o con melón... me sorprendió que la gente la comiera con uvas y con sandía. Pero también tiene que estar buenísima, por lo que os lo dejo como otra opción por si queréis probarla así.
Ingredientes
Foto y receta por La Flor del Azafran |
- 6 tomates maduros
- 1/2 pimiento verde
- 1/2 pimiento rojo
- 2 ajos
- 1 vaso de vino blanco
- 1/2 litro de agua
- Sal
- Aceite
- Pan
- Higos
En una cazuela ponemos un chorrito de aceite.
Troceamos en dados los tomates y los incorporamos a la cazuela. Hacemos la misma operación con el pimiento y añadimos una pizca de sal.
Dejamos que se vaya haciendo durante unos 15 o 20 minutos, moviendo de vez en cuando para que no se pegue el tomate.
Por otro lado, machamos los ajos en un mortero y reservamos.
Cuando veamos que el tomate está a punto, incorporamos los ajos con el vaso de vino, y dejamos un par de minutos que se termine de hacer.
A continuación, trituramos bien todo y le incorporamos el agua.
Probamos para ver cómo queda de sal, y en caso de necesitarlo, añadir un poco más.
Dejarlo unos 10 minutos a fuego medio, y cuando queramos servimos; para ello, cortaremos el pan en laminitas finas en el plato donde vayamos a incorporar el caldo.
Pelamos unos higos e incorporamos el caldo sobre el pan, y ponemos unos higos en cada uno de los platos, o bien en una fuente común para que cada uno vaya cogiendo los que quiera.
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